Colegio Jesús-María Alfonso X de

Murcia

Tengo a mis 3 hijos allí desde los 3 años y el mayor termina bachillerato este curso, así que me considero una persona con capacidad para dar una opinión de Jesús María Alfonso X. Mis 3 hijos han estado muy agusto dentro en todas las etapas (lejos de que un profesor les gustara más a menos, que eso es igual en todos lados). Nunca me han dicho que no quieran ir al cole y siempre los he visto contentos. Para mi eso ha sido siempre fundamental, más que un punto más o menos en una nota. Además, se pondera la educación en valores, con actividades fuera del horario lectivo como Grupos JM o La Marcha Solidaria, muy necesario en la sociedad que vivimos actualmente. En lo académico en líneas generales también estoy contenta, sobre todo con el sistema de aprendizaje de Matemáticas y el digital. Las instalaciones, la verdad que pocos coles pueden tener en pleno centro las pistas y espacios que tiene Jesús María Alfonso X. En resumen, aunque hayan cosas que no me gusten, como en todos sitios, estamos muy contentos de haber tomado la decisión de llevar a nuestros hijos a Jesús María.

Dicen que uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde. En mi caso, no fue exactamente así porque nunca perdí el contacto con el que fue mi centro desde infantil a bachillerato, pero si es cierto que hasta que no salí de él no fui tan consciente de la tremenda suerte que había tenido de estudiar en él. Más allá del nivel educativo o las maneras de enseñanza, las cuales recuerdo muy adaptadas al alumnado, o las grandes instalaciones en las que constantemente están haciendo reformas para mejorar, lo que más se siente en este centro es la cercanía y preocupación por cada uno de sus alumnos. Los valores que intentan transmitir son una pieza clave para el éxito futuro de cualquier persona, especialmente en un mundo donde cada vez hay menos presencia de este tipo de valores, como la solidaridad, el respeto, la paz o el amor por encima de todo. Su ideología cristiana es de tal calidad que siempre va de la mano de fomentar un pensamiento critico y el gusto por formar unas mentes capaces y libres. En definitiva, ojalá todos los niños pudieran ir a un centro como este.